Creo que la era de las lagrimas de rabia y las groserías en su nombre ya paso… supongo que gracias a él el proceso se ha agilizado, y cada cosa que hace o dice solo me preparan para la próxima estocada, no se si me sorprenda o me duela más, a veces, ni se lo que siento; solo sé que me le entregue a un hombre a quien hoy le valgo un pedazo de materia fecal.
Ayer lo vi, y me saludo, al verlo sentí lo mismo que sentía cada vez que lo veía cuando solía vivir en la mentira que él me creaba, y eso me aterra; simule tratarlo como si no existiera, tanto que mi respuesta a su saludo fue quedarme petrificada. De hecho estuve feliz, y no por aparentar, en realidad me sentí tranquila, pero la reacción vino después, casi 24 horas después a todo lo que escuche sobre el y de el, su "Hola María" me retumba en la cabeza, en realidad es como si las palabras que me ha dicho desde que lo conocí estén en un complejo nudo en mi cabeza, sonando y sonando. Tanto que me he acordado de cosas que me hacen pensar que el pataletudo aquel, no esta haciendo mas que lo que solía hacer, una pataleta, y que en realidad nada de lo que ha dicho lo siente en el corazón, pero después la rabia vuelve, y aunque suene absurdo, me hace razonar.
Quiero dejar de levantarme y que sea en lo único que pueda pensar. Quiero que sea como en las imágenes que dicen "Él se dio cuenta de que aún la quería y el volvió para pedirle perdón. Ella lo miró y lo mando al carajo" jajaja el problema acá es que "él" no va a volver ni a insultarla para que "ella" lo mande al carajo. Así que, hasta acá la historia de desamor. Será cuestión de costumbre, y mientras me acostumbro a todo sin el, viviré la tusa, pero seré feliz.
Ayer lo vi, y me saludo, al verlo sentí lo mismo que sentía cada vez que lo veía cuando solía vivir en la mentira que él me creaba, y eso me aterra; simule tratarlo como si no existiera, tanto que mi respuesta a su saludo fue quedarme petrificada. De hecho estuve feliz, y no por aparentar, en realidad me sentí tranquila, pero la reacción vino después, casi 24 horas después a todo lo que escuche sobre el y de el, su "Hola María" me retumba en la cabeza, en realidad es como si las palabras que me ha dicho desde que lo conocí estén en un complejo nudo en mi cabeza, sonando y sonando. Tanto que me he acordado de cosas que me hacen pensar que el pataletudo aquel, no esta haciendo mas que lo que solía hacer, una pataleta, y que en realidad nada de lo que ha dicho lo siente en el corazón, pero después la rabia vuelve, y aunque suene absurdo, me hace razonar.
Quiero dejar de levantarme y que sea en lo único que pueda pensar. Quiero que sea como en las imágenes que dicen "Él se dio cuenta de que aún la quería y el volvió para pedirle perdón. Ella lo miró y lo mando al carajo" jajaja el problema acá es que "él" no va a volver ni a insultarla para que "ella" lo mande al carajo. Así que, hasta acá la historia de desamor. Será cuestión de costumbre, y mientras me acostumbro a todo sin el, viviré la tusa, pero seré feliz.
De vuelta al mercado, pero con etiqueta de "no usarse por un tiempo".
María de la montaña.
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